Parece que la Mesa del Árbol y el protocolo para el cierre de parques en Madrid está dando para rato. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha vuelto a tender la mano a la oposición en el Ayuntamiento de la capital para crear una mesa técnica. “Entiendo que efectivamente hay una cierta incomprensión respecto al riesgo que supone”, explica Almeida.
Una propuesta que llega tras asegurar que el protocolo lo llevaron a la Mesa del Árbol realizada la semana pasada y en la que la oposición “no quiso cambiar el protocolo”. El regidor ha aclarado que no quiere que pase nada como en la época de Ana Botella y Manuela Carmena, donde a “una se le tachó de asesina y a la otra de accidente”.
Sin embargo, tras la celebración de la mesa, la portavoz del Partido Socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Reyes Maroto, se mostró sorprendida porque en el orden del día de la reunión de la Mesa del Árbol no se había incluido la revisión del protocolo de El Retiro y el resto de los parques históricos de Madrid ante alertas por climatología adversa.
“Solo incorporan los planes directores de los parques en los que han estado trabajando el último año y de los que, lamentablemente, no nos han pasado documentación”, advirtió la portavoz del PSOE, quien añade que el Gobierno municipal “no quiere hablar de los protocolos que generan problemas como el cierre de la Feria del Libro o las quejas vecinales por no poder disfrutar de estos espacios”. Considera que “Almeida llega tarde a todo”.
La portavoz de Más Madrid, Rita Maestre, también se posicionó al respecto y aclara que “sin saber el estado del arbolado no se pueden plantear propuestas de mejora, ni de modificación de los protocolos. Nosotros queremos conocer el estado del arbolado”. De hecho, sentenció que son datos que el Gobierno de Almeida “oculta”.
El delegado de Medio Ambiente, Movilidad y Urbanismo, Borja Carabante, aseguró que están abiertos a las propuestas de los grupos municipales y afirma que cada verano aparece la “crítica recurrente de la izquierda”, pero que no se niegan a revisar y actualizar estos protocolos, “siempre bajo condiciones de los servicios técnicos y garantizando la seguridad”.