Quienes creemos en la democracia, y en las instituciones, creemos que hay que respetar el resultado de las elecciones cuando son libres. Por ello nos entenderán cuando decimos que ver imágenes de los sucesos de Brasil nos causan verdadero pavor, porque sabemos lo que significan.
Ya sucedió al ver el asalto al congreso de los Estados Unidos, hordas de derechistas intentando tomar el poder por la fuerza, con la pasividad de una parte importante de las fuerzas de seguridad y jaleados por los medios de comunicación, regados por el dinero de los grandes empresarios.
¿Pero saben que es lo que da más miedo y causa más preocupación a quienes amamos la libertad? Los señores y señoras del Partido Popular y de Vox que jalean estos hechos, que los defienden y lo que es más grave, que quieren que sucedan en España y trabajan por ello. Es terrible.
Pronto hará 87 años que se produjeron las últimas elecciones de la Segunda República Española; una coalición de izquierdas, el Frente Popular, ganó con claridad las elecciones, pero eso a la derecha le dio igual y, utilizando todo su poder económico y mediático, y usando de punta de lanza a las Fuerzas de Seguridad, desencadenaron una matanza horrible que acabó con la democracia en España. ¿No suena tan lejano, verdad?
Demostramos que se puede cambiar a mejor la vida de los españoles y españolas
Ese es el problema de fondo, que la derecha en España considera que esto es un cortijo, un sitio donde enriquecerse y donde aplicar el derecho de pernada. Así ha sido siempre, y cosas como la democracia les suponen un problema de extrema gravedad, porque a pesar del dinero, de la corrupción, del uso de los medios para difundir mentiras, de usar a la policía para crear pruebas falsas... con todo eso y con más, se les acaba colando en el gobierno Podemos, y resulta que demostramos que se puede cambiar a mejor la vida de los españoles y españolas.
No puede haber causa más común y más universal que la justicia, que la libertad, y por eso debemos defenderla con uñas y dientes allí donde estemos. Móstoles, además, y quienes somos de aquí lo decimos siempre con orgullo, lo llevamos a gala, tiene un lugar inmortal en la historia de España, por el valor que demostraron sus humildes vecinos cuando el Imperio más grande de la época decidió conquistar nuestra patria. Mientras, los ricos y poderosos, los antepasados de quienes ahora lideran el PP y VOX, corrían a ponerse a las órdenes de los invasores.
Estos vendidos traicionaban a su pueblo. Tristemente, la victoria del pueblo español se vio frustrada por la vuelta de los Borbones, encarnada en uno de sus ejemplares más lamentables y criminales, Fernando VII. ¿Adivinan quiénes corrieron a ponerse a sus órdenes y a matar a los liberales que habían promulgado la Constitución de Cádiz? Sí, aciertan, los mismos antepasados de quienes mandan ahora en el PP y VOX.
España tiene una historia triste, una historia dura, debido a esta casta de vividores y vagos que engrosan las derechas. Son un rival difícil, porque tienen mucho dinero y con dinero se compran muchas voluntades, pero afortunadamente no todas, y por eso, aunque nos odien, no han podido evitar que las de Podemos estemos aquí trasladando la voz del pueblo.
Mónica Monterreal Barrios