El Ayuntamiento de Alcorcón ruega a la Comunidad de Madrid políticas públicas para garantizar vivienda pública y alternativa habitacional frente a los desahucios. La corporación local admite que se encuentra volcada en buscar soluciones ante estas situaciones.
Pese a la intención, el Consistorio no dispone de vivienda de emergencia social debido a que el Partido Popular, bajo el mandato de David Pérez, liquidó la empresa pública de la vivienda, EMGIASA, acabando con el único método que tenía para ofrecer alternativas habitacionales y poner en marcha políticas de viviendas en materias de especial importancia para la ciudadanía, como el alquiler. Por ello, piden a la Comunidad de Madrid una solución real.
España tiene 0,5 viviendas sociales por cada 100 habitantes, mientras que la media de la Unión Europea es de 3,8
El problema de la calle Praga
El gobierno municipal explica la situación de la Calle Praga como algo heredado y que corresponde al gobierno de la región, por competencias. En este sentido, la situación no solo necesita de lo relativo a vivienda, que es fundamental, sino que también debe garantizarse un abordaje que tenga en cuenta los derechos a la seguridad y la convivencia de las vecinas y vecinos.
Para ello, desde el Ayuntamiento aluden a los informes de policía y bomberos, donde se alerta de actos delictivos, como de la peligrosidad arquitectónica y de mantenimiento de estos inmuebles. Además, recuerda que en ocasiones anteriores se ha reubicado a muchas familias, pero, la falta de una solución integral por parte de la Comunidad de Madrid no ha evitado que estos inmuebles volvieran a ser ocupados.
Por último, señalar los datos que aporta el comunicado del gobierno local. España es uno de los países con más falta de vivienda social, especialmente grave en la Comunidad de Madrid. España tiene 0,5 viviendas por cada 100 habitantes, muy lejos de otros países europeos como Dinamarca (9,5 por cada 100 habitantes), Austria (10,3 por cada 100 habitantes) o Países Bajos (12,5 por cada 100 habitantes) y también de la media de la Unión Europea (3,8 por cada 100 habitantes).