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Miguel Ángel López Valverde, el primer consejero de Digitalización que tiene la Comunidad de Madrid, está formándose para ser mejor orador y poder transmitir el mensaje tanto a la ciudadanía como a aquellos a los que rinde cuentas en la Asamblea de Madrid. Estos cursos están siendo objeto de polémica porque se han pagado con dinero público, no obstante, hay bastantes argumentos que podrían tumbar las críticas de la oposición.

Así, la Comunidad de Madrid habría invertido 7.562,90 euros en uno de los cursos mencionado, y otros 11.343,75 para otra formación en habilidades comunicativas, ambos contratos menores que suman un total de 18.906,25 euros dentro de un presupuesto regional de 28.662,6 millones de euros. Es decir, un 0,000065% del presupuesto público total para que el consejero sea más eficaz para la ciudadanía. Como dice el director de este medio, por ese fin, hasta se los financiaba él.

En cuanto al fundamento de estos cursos, la Ley 40/2015 de Régimen Jurídico del Sector Público, en su Artículo 3 establece que las administraciones deben actuar "de acuerdo con los principios de eficacia, eficiencia y servicio al ciudadano". Una formación pagada con dinero público, recogida de manera pública en el Portal de Transparencia, y con el fin de mejorar un servicio, se podría considerar un gasto orientado a esa eficiencia.

Así mismo, si acudimos al Estatuto Básico del Empleado Público, en su Artículo 14, recoge el "derecho" a la "formación continua" para el desarrollo profesional; y en su Artículo 13 establece que los altos cargos sí pueden participar en programas formativos adecuados a su puesto. En este caso, el consejero de Digitalización no solo gestiona, sino que debe rendir cuentas ante la ciudadanía y ante los grupos políticos en el parlamento autonómico, por lo tanto, necesita saber comunicar.

Otro texto a consultar es la Ley 9/1990 de Hacienda de la Comunidad de Madrid, la cual establece que los gastos tienen que tener una finalidad "pública", deben estar justificados y ser proporcionales. Estos cursos aparecen en el Portal de Transparencia y suponen un 0,000065% del presupuesto total de la región. Además, dentro del presupuesto de gasto autonómico, siempre se destina una parte del Capítulo 2 a la formación de altos cargos y funcionarios. Es decir, la formación de Valverde no tendrían por qué suponer un desembolso extra, sino que estaría contemplada dentro del presupuesto madrileño.

A más inri, podemos dar un salto a los Presupuestos Generales del Estado (de 2023, ya que no hay nuevo), a la sección de gastos, aparecen varias partidas de "formación y perfeccionamiento del personal". En esos apartados se recoge exactamente lo mismo que lo anteriormente mencionado, dinero público destinado a formar a agentes también públicos, desde funcionarios hasta altos cargos.

¡Y vaya, los ministros también se forman con dinero público! Este curso lo hemos "becado" todos por 14.652 euros, nada más y nada menos. En definitiva, y de parte del director de este medio: ¡Grande Valverde por querer ser mejor consejero!