La fiesta que se celebraba en la madrugada del sábado 5 de mayo fue clausurada por los agentes de la Policía Municipal, ya que en ella se encontraron a 95 menores de edad en el interior de la discoteca Cuore, en la calle Escolares.
Los agentes inspeccionaron el local por sospechas de la presencia de menores en su interior. El registro de la discoteca desveló que dentro se encontraban casi un centenar de chicos y chicas que no llegaban a la edad legal necesaria para entrar en el establecimiento ni para para consumir bebidas alcohólicas.
Los organizadores de la fiesta habían pensado en todo con una llamativa oferta como la venta de entradas con dos consumiciones alcohólicas por solo 6€, que los menores no podían conseguir sin que se verificase su edad.
El alcalde, David Pérez, ha fecilitado a los agentes de la Policía Municipal que realizaron la intervención: "En Alcorcón tenemos una máxima constante que es la tolerancia cero contra la venta y consumo de drogas y, por supuesto, también contra la venta de bebidas alcohólicas a menores. Los agentes han clausurado distintos localores por este motivo a lo que además, se les ha interpuesto fuertes sanciones económicas. Detrás de la venta de alcohol a menores suele estar la negligencia de los repsonsables de verificar la edad de los mismos, poniendo en evidente riesgo la salud de los chavales que legalmente no pueden consumir bebidas alcohólicas".
En Alcorcón tenemos una máxima de tolerancia cero contra la venta y consumo de drogas y bebidas alcohólicas a menores
No cuenta con el Plan de Emergencias
El trabajo de los agentes de Policía Municipal ha servido para detectar que la discoteca carecía del obligatorio Plan de Emergencias en vigor. El responsable del local se enfrente al cierre del establecimiento y a multas económicas que pueden llegar a los 250.000 euros por infringir la Ley de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas de la Comunidad de Madrid (LEPAR).
Esta no ha sido su primera actuación, ya que el año pasado también descubrieron a 111 menores de edad en el interior de un restaurante de la avenida Libertad, donde estaban consumiendo alcohol, tabaco y drogas en la celebración de Halloween.