El pleno municipal del Ayuntamiento de Serranillos del Valle debatió y finalmente aprobó el expediente para la adjudicación del contrato de obras para el acondicionamiento del edificio de la calle Asturias que será la nueva sede consistorial. Se trata de una iniciativa promovida por el equipo de Gobierno de Transparencia y Democracia y del actual alcalde, Iván Fernández. Frente a este proyecto se ha posicionado el PP que su portavoz, Juan Quintana, dice que es "un atropello".
El alcalde, en representación de TDS, defendió el proyecto como una medida necesaria y estratégica para el municipio. "Esto forma parte de un movimiento importante de edificios que lo hemos explicado hasta la saciedad, donde vamos a hacer un ayuntamiento nuevo que por capacidad, este ya se nos queda pequeño", afirmó. Subrayó que el edificio actual no cumple con las normativas y que la rehabilitación del inmueble de la calle Asturias, donde ya se invirtieron "cerca de ochocientos mil euros", es una forma de aprovechar recursos y evitar un derribo costoso. La propuesta incluye la reubicación de la biblioteca al actual ayuntamiento y la posibilidad de establecer un destacamento de la Guardia Civil en el centro del pueblo. Además, el alcalde enfatizó que el proyecto, iniciado en 2022 y autorizado por la Comunidad de Madrid, es un compromiso incluido en su programa electoral que obtuvo en las elecciones de 2023 un amplio respaldo de los vecinos y vecinas. No en vano, el actual equipo de Gobierno cuenta con 8 de los 11 concejales del pleno municipal gracias al contundente resultado en las urnas.
Por su parte, el concejal del Partido Popular, Juan Quintana, manifestó su rotundo desacuerdo con la propuesta. Calificó el proyecto de "un auténtico atropello a nuestro pueblo". Quintana argumentó que trasladar el edificio del ayuntamiento fuera del centro histórico "es alejar a los vecinos de sus instituciones, romper la esencia de Serranillos y condenar al centro a la decadencia". Cuestionó también la inversión adicional de "más de un millón de euros para adaptarla, pero no como biblioteca, sino para hacer un nuevo ayuntamiento". . También expresó su preocupación por la falta de consultas vecinales sobre una decisión de esta envergadura.
Desde Vox, Guillermo Castaño expresó una postura de apoyo condicionado. Reconoció la "necesidad de trasladar lo que es el edificio del Ayuntamiento, dado de que no reúne tampoco unas condiciones óptimas para desarrollar sus funciones". Valoró que el proyecto haya cumplido con los informes técnicos y legales, y enfatizó la importancia de una "gestión responsable que ponga por delante lo urgente frente a lo innecesario". Añadió que su grupo no pondrá "obstáculos porque no creo que es algo bueno para los vecinos", priorizando la calidad de vida de los habitantes del municipio.
El debate del pleno puso de manifiesto las diferentes visiones sobre el desarrollo urbanístico y la gestión de los recursos públicos en Serranillos del Valle. En algunos momentos de la sesión se llegaron a vivir momentos de tensión. El alcalde, en base al Reglamento Orgánico Municipal, sancionó a Juan Quintana con una multa de 500 euros por interrumpir el turno de palabra tras el tercer aviso del regidor.
El alcalde enfatizó que el proyecto está autorizado por la Comunidad de Madrid y es un compromiso de su programa electoral