La crisis de los cribados. Así nos referimos ya a la polémica suscitada en torno al sistema de cribados de cáncer en las comunidades autónomas. En Madrid, VOX exige una auditoria para conocer “qué es lo que se está haciendo en nuestra región en relación a los cribados de cáncer de mama”. Isabel Pérez pone el foco en los errores que se han registrado en varias regiones, como Andalucía. “El error en el cribado del cáncer de mama es lamentable”, dice la portavoz de VOX en la Asamblea de Madrid, recordando que su formación política está “exigiendo al señor Bonilla que adopte las medidas pertinentes porque ha reconocido que estaba aplicando unos cribados anteriormente aplicados en la época socialista”. “Nosotros vamos a exigir responsabilidades porque aquí estamos hablando de que se ha puesto en peligro la salud de muchas mujeres en toda España”.
Precisamente en esta línea, VOX exige también esa auditoría de sistema de cribado de cáncer de mama en la Comunidad de Madrid para conocer en qué situación se encuentra la región en este sentido. Por su lado, el portavoz del PP en la Asamblea, Carlos Díaz-Pache, asegura que “en Madrid somos pioneros en los cribados de detección precoz de cánceres” y defiende “la extraordinaria gestión de la Sanidad madrileña en estos cribados”.
El último capítulo de esta polémica lo protagoniza el platón de los consejeros del PP a la ministra de Sanidad, Mónica García. Los populares abandonaron el Consejo Interterritorial entre acusaciones de “sectarismo” a la ministra. La consejera de Sanidad de la Comunidad de Madrid insiste en que García "no gobierna para todos, sino que hace oposición desde el ministerio como candidata de Más Madrid". Matute asegura que en Madrid se cuenta con un método fiable que "lleva mucho tiempo funcionando" y sostiene que la petición de los datos por parte de Sanidad "parece responder a una estrategia de confrontación política”. En este mismo sentido, Carlos Díaz-Pache afirma que la petición “es absurda, improcedente y no tiene ningún sentido”, señalando al ministerio que dirige Mónica García de pretender “manosear y fiscalizar el trabajo de las comunidades autónomas, generando inquietud entre los pacientes y la población diana”.