El Consorcio Regional de Transportes de Madrid (CRTM) ha presentado el proyecto que transformará la movilidad en Boadilla del Monte en los próximos años. Estas actuaciones, que deberán ser licitadas y adjudicadas antes de su puesta en marcha, comenzarán a implantarse progresivamente a partir de 2027.
Las medidas incluirán el refuerzo del transporte urbano, con la ampliación de líneas de autobús y frecuencia. En concreto, se contempla:
- Sustitución de las líneas 1 y 2 por dos líneas circulares, con una frecuencia de 20 minutos, aumentando la cobertura dentro del municipio.
- Prolongación del recorrido de la línea 4 hasta la confluencia de las calles Río Guadarrama y Río Tajo, y modificación a su paso por la avenida Pedro Valdivia.
Conexiones más rápidas con Madrid:
- La línea 571 simplificará su itinerario y establecerá la cabecera en la confluencia de las calles Río Guadarrama y Río Tajo. Además, pasará por El Encinar para dar servicio a esta zona.
- La línea 573 modificará el itinerario exprés, que pasará a ser más corto, reduciendo tiempos de viaje y mejorando la conexión directa con Moncloa.
- La línea 574 se reforzará en horas punta hacia Aluche, donde se enlaza con la red de Cercanías.
- La línea N905 (Moncloa–Boadilla) ofrecerá frecuencias homogéneas y más expediciones los fines de semana y vísperas de festivo, ofreciendo un servicio nocturno más seguro y regular.
Nuevas conexiones:
- La línea 510 prolongará su recorrido, creando una nueva conexión directa de Boadilla con Villaviciosa de Odón y Alcorcón.
- La línea 567 reordenará los horarios de salida, estableciendo frecuencias homogéneas.
- La línea 575 se prolongará hasta Villanueva de la Cañada, reforzando la conexión con Brunete y la zona universitaria.
Habrá una nueva línea (860) que enlazará Boadilla con Alcorcón a través de la M-50, facilitando el acceso a municipios vecinos y la conexión con Metro Sur.
Además de de las modificaciones en las líneas, el plan prevé la introducción de autobuses híbridos y de cero emisiones, con el objetivo de reducir en un 40 % la huella de carbono entre 2026 y 2035. También se incorporarán vehículos más accesibles (espacios para carritos y sillas de ruedas), wifi gratuito, pantallas informativas y sistemas de videovigilancia para mejorar la seguridad y el confort de los pasajeros.