Nuevas estafas surgen con el fin de esquivar las actuales medidas de seguridad. En este caso la Guardia Civil nos avisa sobre el ‘SIM swapping’, que consiste básicamente en eludir la confirmación vía teléfono móvil, en transferencias y pagos online a travésde un duplicado de tarjeta.
Este fraude es mayoritariamente precedido de otro robo de datos, ya que sería necesario conocer los datos de la tarjeta, del titular, y su número de teléfono.
La Guardia Civil alerta de la relevancia que han ganado este tipo de estafas durante los últimos años.
Al sufrir una suplantación de tarjeta SIM, el dispositivo se queda sin cobertura. Este es el indicio más preocupante, ya que, si somos una víctima de este tipo de estafa y tenían datos nuestros previamente, el estafador podrá acceder a la totalidad del contenido guardado en nuestro teléfono móvil.
Si acceden al contenido de nuestro teléfono, el asunto es grave, con la contraseña de nuestro correo electrónico y la verificación por teléfono, se han dado casos muy graves. El País relata un caso en el que la víctima sufrió un robo de varios miles de euros, y descubrió que pidieron un préstamo de 50.000 euros a su nombre.
Si nos encontramos con que nuestro dispositivo se ha quedado sin cobertura sospechosamente, procederemos a reiniciar el móvil y comprobar su funcionamiento. Si el problema continúa, podemos probar la SIM en otro dispositivo para descartar fallos en el otro teléfono. El paso siguiente sería llamar a nuestra compañía telefónica para descubrir el problema.
Las operadoras de telefonía aseguran que para que nos hagan una copia de la SIM es imprescindible presentarse en la tienda, ser el titular de la línea telefónica e ir con el DNI.
Pero, entonces ¿cómo consiguen realizar un duplicado? El teniente Vico explica en el diario El País, que los delincuentes, que pueden ser desde estudiantes con conocimientos informáticos hasta grupos organizados en estafas y fraudes bancarios, suelen emplear técnicas de ingeniería social para lograr los datos personales de la víctima y después engañar a los empleados de las tiendas. “Lo más común es que digan que se les ha perdido la tarjeta”.
Aunque en las operadoras también existen casos de negligencia del trabajador o de muchas otras maneras. "Desde sobornos a empleados a un no buen uso de la red de la operadora", explica Carlos Vico.
Los casos más comunes en los que nos sustraen nuestros datos suelen ser estafas como el phishing. Para evitarlas, es importante no dar nunca nuestros datos bancarios en sitios de dudosa reputación y aprovechamos para recordaros que los sitios oficiales nunca te pedirán tus datos personales por correo electrónico.