El Partido Socialista ha pedido en el Pleno de Madrid que el Ayuntamiento apoye el acuerdo estatal por la vivienda que presentó el Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante la conferencia de presidentes. “Estamos ante una emergencia habitacional sin precedentes y lo más grave es que desde el Consistorio siguen negando lo evidente”, asegura el concejal del PSOE, Pedro Barrero.
Para el concejal, Madrid “tiene los precios más altos en toda España, tanto en compra como en alquiler, además del mayor número de pisos turísticos ilegales. Tiene el modelo de regulación urbanística más salvaje del país y, además, un desmantelamiento progresivo de la vivienda pública vendida a fondos buitre y condenada a la desaparición”.
Defienden, frente a estas políticas de Madrid, un acuerdo estatal por la vivienda presentado por el Gobierno de España, que es “ambiciosa, técnica y socialmente necesaria”. Un proyecto que incluye tres medidas claves: triplicar la inversión pública, blindar el parque público de vivienda y convertirlo en permanente y crear una base de datos pública y trasparente y precios reales de compra y alquiler.
Barrero critica que votar en contra de este acuerdo es posicionarse “en contra de los jóvenes que no pueden emanciparse, contra las familias que no llegan a fin de mes y contra las personas mayores atrapadas en viviendas inadecuadas”. De hecho, ha concluido asegurando que el Partido Popular vota “contra su ciudad, porque lo suyo no es gobernar, es bloquear, confrontar y sabotear”.
El delegado de Vivienda, Álvaro González, se ha posicionado en contra de las políticas de vivienda del Partido Socialista. Una crítica a la que, según dice, se han unido los vecinos “desde que está Sánchez”. “La mayor preocupación de todos los madrileños es la vivienda gracias a sus políticas ineficaces”, añade.
El político popular define como una “vergüenza” ese acuerdo estatal presentado por el Presidente del Gobierno, puesto que “han dado 48 horas a las comunidades para poder estudiarlo. Sin acordarlo con nadie. solamente es una cortina de humo para disfrazar la corrupción que ustedes tienen en el propio Gobierno”.