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El PSOE de Leganés denunció hace unos días el malestar generado entre algunas familias de la Escuela Infantil Koala ante el cierre de un aula del centro y la unificación de los alumnos de 1-2 años y 2-3 años debido a la baja demanda de plazas que ha habido este año. Los socialistas pusieron el foco en el Gobierno local al que han acusado de "grave falta de planificación, de ceder ante las presiones de la empresa adjudicataria del servicio y de ser incapaces de garantizar la estabilidad de un servicio público".
En Televisión Digital de Madrid hemos charlado unos minutos con la concejala de Educación, Mercedes Neria (ULEG) para que nos contara en primera persona todo lo sucedido. La edil leganense llega a la conclusión que ante el problema surgido "la única opción para evitar el cierre de la Escuela Koala era crear un aula mixta".
Este pasado 17 de noviembre abrió dicha aula mixta para niños de 1–2 años y 2–3 años ante el riesgo de cierre del centro, después de que la empresa adjudicataria comunicara su intención de abandonar el contrato a partir del 1 de enero debido a pérdidas económicas.
Según cuenta Neria, todo comenzó hace mes y medio cuando una madre advirtió una posible falta de personal, especialmente en el horario de salida. Tras una visita municipal, se comprobó que no se había cubierto la reducción de jornada de una trabajadora. La concejala trasladó a la empresa la obligación de cumplir el contrato, pero la responsable del servicio alegó que la disminución de matriculación -27 plazas vacantes- hacía económicamente inviable contratar más personal, y anunció su salida del centro, incluso asumiendo la penalización contemplada en el contrato.
Ante la posibilidad de dejar a 90 familias sin escuela y provocar el despido de todo el personal, el Ayuntamiento analizó alternativas con la asesoría jurídica. La única opción viable, afirma Neria, fue crear este aula mixta, una práctica habitual en educación infantil aunque generalmente se organiza a principios de curso. La medida fue finalmente autorizada por la Dirección de Área Territorial Madrid Sur, requisito indispensable al encontrarse fuera de plazo.
La concejala subraya que la selección de los niños que comparten la nueva clase responde exclusivamente a criterios pedagógicos establecidos por la dirección y las tutoras del centro, basados en la madurez y edad de los menores. Neria asegura que ningún trabajador será despedido y la maestra que deja de ser tutora pasará a desempeñar funciones de apoyo para mantener las referencias afectivas de los niños.
Respecto a las críticas del PSOE Neria sostiene que no ha recibido “ni una llamada” del partido para informarse del caso y considera que existe “desinformación y mala fe”. Defiende que la situación no se debe a errores de programación, sino a una fluctuación imprevisible de matriculación, algo habitual en los primeros meses del curso.
La concejala afirma comprender la preocupación inicial de algunas familias, pero asegura que otras han mostrado apoyo tras conocer los detalles y que la adaptación de los menores será rápida: “Los niños se adaptan mucho mejor que los adultos”. La propia edil adelanta que en breve visitarán de nuevo la escuela para evaluar el funcionamiento del aula mixta.
Neria insiste en que la decisión es “la más responsable” y recuerda que la fórmula es reversible: si el próximo curso aumenta la matriculación, el aula podría volver a dividirse. El Consistorio se ha comprometido a reforzar la visibilidad del centro para favorecer futuras inscripciones.
La edil defiende que el objetivo ha sido en todo momento proteger el derecho a la educación de los pequeños y mantener la estabilidad laboral de las profesionales, evitando un cierre que considera “mucho más grave” que reorganizar un aula a mitad de curso.
Puedes ver la entrevista completa pulsando en el play de la foto.