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La candidata de Podemos a la Alcaldía de Leganés es familiar, "rebelde e inconformista desde siempre", orgullosa 'pepinera' y con deseos de convertir Leganés en "la ciudad soñada".
El superpoder soñado para Alba sería volar y si pudiese comprar algo, no lo duda ni un segundo: "amor" y si es en un "frasco enorme", mejor.
A pesar de que no le gustaría mucho eso de cambiarse los papeles por otro político o política, en caso de hacerlo lo haría con Irene Montero, aunque solo por 24 horas.
Su referente es, sin duda, "mi padre" y, lejos de la familia, su compañera y amiga Gema Gil, con la que ha compartido muchas horas tanto dentro como fuera de la política.
Mi fondo de pantalla es una foto con mi abuelo, para poder verle siempre
Se define como una persona que "siempre he sido muy rebelde e inconformista" desde que era una niña. Su primer trabajo fue en una peletería "vendiendo chaquetas de piel".
En la polémica de Ana Obregón lo tiene claro, al igual que cuando le preguntamos por el aborto, la guerra en Ucrania y su fe en Dios.
En cinco años espera ser alcaldesa de Leganés y que la sociedad haya avanzado hacia un modelo socialdemócrata de centro izquierda.
Los recuerdos de sus abuelos y los valores que le han inculcado han sido los grandes protagonistas de la entrevista.
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