En la ciudad de Madrid mueren al año, de media, 177 personas a causa de las altas temperaturas provocadas por el cambio climático, según un estudio realizado por el proyecto MCC que acaba de publicar la revista Nature Climate Change.
Un tercio de las muertes que se producen por las altas temperaturas son provocadas por el deterioro de nuestro ecosistema lo que supone unas 100.000 muertes al año en todo el mundo por calor. Una conclusión a la que han llegado 70 investigadores que han participado en el proyecto y que han cotejado datos obtenidos desde 1991 hasta la actualidad en 732 localizaciones de 43 países del mundo, excluyendo el continente de África pues falta mucha información como para poder incluirla en el estudio.
Desde principio de los 90 hasta ahora, la proporción de fallecidos a causa del cambio climático en Madrid ha aumentado en un 32%, no obstante en otros lugares del mundo la cifra llega a tasas terroríficas como en Santiago de Chile donde supone un 43% o en la Ciudad de Ho Chi Minh en Vietnam donde suponen el 48,5%. Ana María Vicedo, directora del estudio lo justifica así: "las poblaciones de la cuenca mediterránea ya eran una zona muy castigada por el calor. Pero las regiones donde el incremento debido al cambio climático es mayor son las de América del Sur y el Sudeste asiático".
Es evidente que la contaminación provoca graves estragos en nuestra salud, sobre todo en nuestras vías respiratorias, pero el calor insoportable provocado por esta ha llegado a causar la muerte de 13.0000 personas en España, durante la cruenta ola de calor que sufrió Europa en 2003. Por eso los expertos advierten de que cada año va a haber más olas de calor más largas y más intensas si no paramos de una vez el daño que le hacemos a nuestro planeta con los gases de efecto invernadero.
El cambio climático no solo demuestra lo importante que es cuidar el planeta en beneficio de nuestra propia salud, sino que también es una señal más de la gran desigualdad que existe en el mundo, pues como se puede ver en los datos obtenidos por el estudio, son las poblaciones más necesitadas las que más están sufriendo los devastadores efectos del aumento de las temperaturas.
Además de seguir medidas como reciclar o utilizar menos el coche para evitar contribuir al cambio climático, ahora que empieza el verano también debemos preocuparnos en protegernos frente al calor y seguir las recomendaciones de los expertos. Entre ellas, no salir de casa en las horas centrales del día, mantenerse hidratado en todo momento, llevar protección solar y protegerse la cabeza con gorros y sombreros para evitar los temidos golpes de calor.