Al fin se vislumbra un atisbo de esperanza en la localidad: el centenar de mayores afectados por el conocido Plan Permuta de Alcorcón reciben buenas nuevas. El Pleno del Ayuntamiento de Alcorcón ha aprobado solicitar a la administración concursal de la Empresa Municipal de Gestión Inmobiliaria (Emgiasa) la modificación del plan de licitación que obliga a 90 familias beneficiarias del Plan Permuta a abandonar sus viviendas adaptadas. De esta forma, la casa consistorial alfarera gestionará los inmuebles y los mayores no tendrán que regresar a sus antiguos domicilios.
La propuesta, llevada al Pleno por el Gobierno municipal, formado por PSOE y Unidas Podemos, ha contado con el apoyo de todos los grupos excepto del PP, alegando no estar dispuestos a dar “una carta en blanco” sin saber “qué consecuencias económicas va a tener para el ayuntamiento la modificación”. En contraposición a la formación popular y según adelantaba la Concejalía de Vivienda a la Corporación, durante una reunión con los administradores concursales de Emgiasa, estos se mostraron “dispuestos” a facilitar al ayuntamiento su colaboración.
Antecedentes
La pesadilla de 90 familias se remonta a hace años, cuando el plan fue puesto en marcha por Emgiasa al levantar alrededor de 7.000 viviendas en el Ensanche Sur, un barrio de nueva construcción junto a la M-50. La ley obligaba a reservar parte de esos pisos a personas con problemas de movilidad. Al final de la promoción, sobraron estas casas, por lo que los responsables de Emgiasa -entonces dirigida por el PSOE- decidieron materializar el Plan Permuta. Este consistía en las personas mayores de 70 años o que padecieran problemas de movilidad cedieran sus viviendas ubicadas en el centro de la localidad para que fueran alquiladas. El objetivo era que se dedicaran a jóvenes de hasta 30 años y que no tuvieran una renta especialmente alta; por el contrario, los beneficiarios recibirían a cambio un piso adaptado.
El titular del Juzgado de lo Mercantil número 6 de Madrid, Francisco Javier Vaquer Martín, dictó el pasado 26 de marzo un auto por el que obligaba al centenar de mayores beneficiario del Plan Permuta a dos opciones: o bien compraban sus actuales viviendas para poder permanecer en ellas, o bien regresaban a las antiguas que habían cedido para el alquiler.