El jueves 22 de mayo se celebró el Pleno Ordinario del Ayuntamiento de Moraleja de Enmedio, en el que se aprobó inicialmente el Presupuesto Municipal para el ejercicio 2025. La propuesta presupuestaria, presentada por el equipo de Gobierno del PP y Vox, generó un intenso debate político tanto dentro como fuera del consistorio entre el PSOE y los partidos del equipo de Gobierno, PP y Vox.
La alcaldesa, Arantxa Godino destaca que esta aprobación representa el segundo presupuesto consecutivo aprobado en esta legislatura, cumpliendo con el calendario legal "algo que no se hacía en gobiernos anteriores por desequilibrios entre ingresos y gastos". Godino subraya también que contar con un presupuesto aprobado permitirá al municipio acceder a subvenciones, como una posible ayuda de 100.000 euros de la Comunidad de Madrid para inversiones locales.
Uno de los aspectos resaltados por el Gobierno local es la reducción progresiva de la deuda, que, según la alcaldesa, "está bajando por primera vez en la historia del municipio". En 2023 se abonaron 217.000 euros en concepto de deuda, mientras que en 2024 la cifra ascendió a 780.000, y para 2025 está previsto un pago de 880.000 euros. "Moraleja de Enmedio es el municipio con mayor deuda per cápita de la Comunidad de Madrid", indica Godino, defendiendo una gestión "responsable y austera".
El PSOE, por su parte, ha respondido a la alcaldesa y le ha acusado de volver a mentir. Señalan los socialistas que el presupuesto aún debe ser validado por el Ministerio de Hacienda antes de su aprobación definitiva. En un comunicado, el PSOE local añade que estas cuentas suponen “un retroceso para el municipio”.
Entre sus principales críticas, los socialistas destacan el cierre de la Escuela Infantil "Érase una vez", con más de tres décadas de trayectoria, como parte de las medidas de recorte contempladas. También señalan una baja asignación a inversiones reales, enfocándose principalmente en obras menores como el embellecimiento de la cuesta de la iglesia.
Asimismo, el PSOE advierte sobre el contenido del informe del interventor municipal, que señala un incumplimiento del límite legal de deuda -con un porcentaje del 674,65%- y un riesgo de superar la regla de gasto si se ejecutan todos los créditos presupuestarios.
Desde el grupo socialista se pide una revisión del presupuesto que priorice necesidades básicas como el mantenimiento de infraestructuras urbanas, servicios educativos y mejoras medioambientales.
El presupuesto seguirá su tramitación pendiente de revisión por el Ministerio de Hacienda, paso obligatorio antes de su aprobación definitiva. Mientras tanto, el debate sobre la dirección de la gestión municipal continúa abierto entre los partidos del Gobierno, PP y Vox, y el partido de la oposición, el PSOE.