Concienciar a la población de los riesgos del cambio climático, es el objetivo de la Hora del Planeta. Los edificios, calles y monumentos más emblemáticos de las distintas ciudades de la Comunidad se apagarán entre las 20:30 y 21:30 de la noche. Este gesto, que puede parecer anecdótico, supondrá un importante ahorro en lo que a emisiones de dióxido de carbono se refiere. Un ejemplo muy ilustrativo es el de Fuenlabrada, donde el gesto evitará una emisión de dióxido de carbono de alrededor de 350 kg.

En la capital, localizaciones emblemáticas como el edificio del Ayuntamiento, la Puerta de Alcalá o la Real Casa de Correos, verán como sus fachadas se apagan. De hecho, la Comunidad de Madrid, fue la primera comunidad en toda España en sumarse a esta iniciativa.