La idea de la construcción de un Centro Acuático Olímpico en Madrid se ha quedado a medias. De la posibilidad de ser sede en unos Juegos Olímpicos a convertirse en un pabellón musical que albergará conciertos con una capacidad de hasta 20.000 asistentes. Una iniciativa, que se admitió a trámite el pasado mes de abril, y que ha sido presentada por Barsento S. L. para “la parcela que se ubica en el inacabado centro acuático, que ha estado demasiados años sin ningún tipo de utilidad para la ciudad”, explica la vicealcaldesa de Madrid y, ahora, alcaldesa en funciones, Inmaculada Sanz. Un nuevo proyecto en el que, además, participa el Atlético de Madrid, de forma minoritaria.
Desde el equipo de Gobierno, asegura la edil, se consideró que se ajusta a planteamiento y que, además, “responde al interés general”. Por ello, una vez se ha finalizado el procedimiento de información pública, desde el área de Obras y Equipamientos van a trabajar “en los pliegos para licitarlo en libre concurrencia, como se hace con cualquier proyecto que se presente en la ciudad”, añade. Tras estas actuaciones, se llevará a cabo la adjudicación de la concesión.
Desde el Partido Socialista no se han mostrado muy a favor de esta nueva obra del Ayuntamiento de Madrid. El concejal de la formación, Pedro Barrero, denuncia que “este suelo público pensado para equipamientos que beneficien a toda la ciudadanía, se va a regalar a intereses privados, como ya hicieron con la ciudad del deporte”.
Para la formación de la oposición, no se trata de oponerse al uso del centro acuático, sino de “exigir que su recuperación sirva al interés general, no al lucro privado. Nadie puede seguir malviviendo su patrimonio. Basta de convertir lo público en negocio”. Recuerdan desde el PSOE que ya denunciaron al área de Obras y Equipamientos el “despilfarro de dinero” que supuso los 190 millones de euros, tanto en la obra y el mantenimiento que durante años ha supuesto el “abandono del edificio del centro acuático”.
“Ahora nos encontramos con la intención del equipo de Gobierno de Almeida de conceder durante 75 años esta parcela pública de más de 66.000 metros cuadrados para que una empresa ligada a grandes eventos construya un macrocomplejo con auditorio para 20.000 personas, hotel de 5 estrellas, campus formativo y centro deportivo, todo de gestión privada”, añade Barrero.
Ante estas declaraciones, Sanz ha asegurado que es “un proyecto que viene a sumar, que se ajusta plenamente a la legalidad urbanística”. Unas declaraciones, tras la Junta de Gobierno, en las que reitera que es una zona que está en transformación respecto a como estaba anteriormente. “Demasiados años ha estado ese edificio sin ningún tip de uso, una vez que no salió la candidatura de las Olimpiadas en su momento”, sentencia la alcaldesa en funciones.