El Consejo de Ministros ha acordado enviar al Congreso de los Diputados el Proyecto de Ley para la reducción de la duración máxima de la jornada ordinaria de trabajo y la garantía del registro de jornada y el derecho a la desconexión. La norma avanza en la disminución de la jornada sin merma de los salarios.
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha destacado que el proyecto "cambia la vida de la gente" y contribuye a la conciliación de los ámbitos laboral y familiar. "El Gobierno ha cumplido, con el presidente a la cabeza, y ahora tiene que hablar la soberanía popular", ha afirmado la vicepresidenta. Yolanda Díaz ha añadido que la tramitación parlamentaria del proyecto va a permitir conocer la postura de cada formación política y ha abogado por "abrir una gran conversación ciudadana" sobre esta materia.
En este sentido, cabe recordar que la norma establece una jornada máxima legal de 37,5 horas semanales (la actual, vigente desde el año 1983, es de 40 horas). "No trabajamos en España como en el año 83, afortunadamente, el mundo ha cambiado y mucho", ha dicho Díaz, quien ha subrayado que numerosos colectivos ya disfrutan de una jornada laboral de 37,5 horas o menos. De hecho, en promedio, el nuevo máximo implica una reducción de la jornada de 48 minutos a la semana.
12,5 millones de beneficiarios
La reforma, según ha detallado la vicepresidenta segunda, beneficia a 12,5 millones de personas trabajadoras, de las que 10,5 millones lo son a tiempo completo y 2 millones a tiempo parcial. Entre los trabajadores a tiempo completo, el 60,5% de los beneficiarios son hombres, mientras que en el caso del trabajo a tiempo parcial, el 75,3% de quienes verían reducida su jornada laboral son mujeres.
Por sectores, más de la mitad de los "beneficiarios" de la reducción se encuadran en cuatro sectores: comercio, industria manufacturera, hostelería y construcción. La vicepresidenta segunda ha apuntado que precisamente en esos ámbitos los márgenes empresariales han crecido por encima de la media en los últimos años. En la hostelería, por ejemplo, los márgenes han aumentado un 105% desde el año 2009 y un 35% desde 2019.
Por comunidades autónomas, el mayor número de supuestos beneficiarios de la reducción de la jornada corresponde a Cataluña, Madrid y Andalucía, que suman más de 6 millones de trabajadores, seguidas por Comunidad Valenciana, Galicia y Canarias.