El grupo municipal Más Madrid Alcobendas, representado por el concejal Mariano Cañas, ha denunciado públicamente el reiterado incumplimiento del Reglamento de Participación Ciudadana por parte del equipo de gobierno del Partido Popular. La formación considera especialmente grave que se impida la grabación del turno de intervenciones vecinales durante las sesiones plenarias, una práctica que vulnera directamente la normativa vigente y socava la calidad democrática del municipio.
Desde la formación han comunicado que en el último pleno municipal, un vecino además solicitó expresamente que se grabara su intervención, una vez finalizado el pleno. Y lejos de atender esta petición legítima, "la presidenta minutos antes había anunciado abiertamente el cese de la grabación con las siguientes palabras: pueden esperar unos minutitos a la grabación, porque esta parte no se graba”, justo antes de dar paso a las intervenciones ciudadanas. Esta decisión para los de Más Madrid choca frontalmente con lo dispuesto en el artículo 4.2 del Reglamento de Participación Ciudadana, que establece de forma clara que “las intervenciones de los vecinos serán emitidas públicamente”.
Más Madrid Alcobendas recuerda que el reglamento vigente es un instrumento legal aprobado por el Pleno municipal que garantiza derechos fundamentales como la participación, la transparencia y el acceso a la información pública. “Un reglamento que no se cumple no es más que papel mojado”, ha señalado el concejal Mariano Cañas, quien considera que impedir la difusión de las preguntas vecinales supone “silenciar deliberadamente la voz de la ciudadanía e impedir que la ciudad conozca cuáles son sus preocupaciones y qué respuestas ofrecen los representantes públicos”.
Más Madrid Alcobendas considera urgente revertir esta práctica opaca y exige al gobierno del Partido Popular que garantice la grabación íntegra de todas las preguntas del público asistente, en el próximo pleno de Julio. Solicitando así que se cumpla en su totalidad el Reglamento de Participación Ciudadana, tal como estipula su disposición final, que encomienda a las autoridades municipales el deber de velar por su cumplimiento efectivo.
“La participación vecinal no es un adorno, es un derecho”, ha afirmado Mariano Cañas, quien advierte de que su grupo seguirá vigilante para que Alcobendas deje de vulnerar sus propias normas y recupere el espíritu de una democracia moderna.