La Universidad de Alcalá se consolida como uno de los pilares fundamentales del desarrollo económico y social de Alcalá de Henares, según reflejan los últimos informes publicados por la institución y los datos municipales. Con una comunidad universitaria formada por 29.083 personas, entre estudiantes de grado y posgrado, personal docente e investigador y personal de administración y servicios, la universidad genera un flujo constante de actividad que repercute directamente en el comercio, la hostelería y los servicios locales, especialmente en el entorno del casco histórico.
De hecho, el impacto de la institución va más allá de su peso demográfico. Según algunos estudios de inserción laboral sitúan a la Universidad de Alcalá entre las mejores del país, con un 86% de los titulados de grado y un 92% de los titulados de máster encontrando empleo durante el primer año tras su graduación, la mayoría en puestos cualificados. Estas cifras demuestran la estrecha relación entre la oferta académica de la UAH y las necesidades del mercado laboral, especialmente en áreas como la biotecnología, la ingeniería, las ciencias de la salud y las tecnologías de la información.
Un estudio reciente sobre su valor social estima que la actividad de la universidad generó en 2019 un retorno económico de 270 millones de euros, lo que equivale a que por cada 100 euros invertidos en su presupuesto, la institución devuelve 166 euros en valor social a su entorno más cercano. Este impacto se refleja en el consumo local, la organización de congresos y actividades culturales, la atracción de talento y la creación de empleo tanto directo como indirecto, así como en el impulso de proyectos de investigación y emprendimiento.
En este último ámbito, la UAH desempeña un papel clave en la creación de nuevas iniciativas empresariales. Sus viveros de empresas y programas de innovación han dado lugar en los últimos años a un número creciente de startups y spin-offs, centradas en sectores emergentes como la biotecnología, el medio ambiente, la ingeniería aplicada o la tecnología educativa. Estas iniciativas contribuyen a reforzar el ecosistema empresarial del Corredor del Henares, una de las áreas industriales más activas de la Comunidad de Madrid.
El dinamismo económico de la ciudad se complementa con el crecimiento experimentado en el desarrollo industrial y logístico. Desde 2019, Alcalá de Henares ha puesto en marcha 566.335 metros cuadrados de suelo productivo, lo que ha permitido la creación de 8.713 empleos directos y una reducción del desempleo superior al 42%. Este avance se suma al impulso generado por la actividad universitaria, configurando un modelo de ciudad en el que la formación superior, la innovación y la industria se integran como motores complementarios de crecimiento.
Con estos datos, la Universidad de Alcalá reafirma su papel no solo como referente académico, sino como uno de los actores más influyentes en el desarrollo económico, laboral y social de Alcalá de Henares, que se consolida como una de las ciudades universitarias más dinámicas del centro del país.