"No soy el defensor de biogás, pero no voy a consentir que circulen mentiras", con esa rotundidad el alcalde de Colmenar Viejo contestaba a las críticas de la oposición. La futura planta de biogás de Colmenar protagoniza la actualidad local y se expande hacia localidades vecinas como Tres Cantos, donde la semana pasada se viralizaba un pleno al que acudieron cientos de vecinos preocupados por las repercusiones que podría tener dicha instalación.
En una entrevista para esta casa, el primer edil mandaba un mensaje de tranquilidad a sus vecinos haciendo hincapié en que "ni en España ni en Europa es posible poner una instalación que sea perjudicial para la salud o el medio ambiente". Desde la oposición han sido muy críticos con el papel del gobierno municipal en la implantación de la planta de biogás, señalándoles como "los impulsores de la macroplanta". En este sentido, Blázquez ponía un símil: "No me gustan las casas de apuesta, pero cuando el negocio cumple con la legislación el ayuntamiento no tiene potestad para denegarles la posibilidad", remarcaba.
Para nuestras cámaras, el regidor colmenareño aseguraba que "va a ser una de las plantas más evolucionadas tecnológicamente". Por este motivo, señala que "hay que hacer de la necesidad de virtud y ponernos la bandera de verdad", porque "el tratamiento de los residuos es un problema de todos los municipios y tenemos que afrontarlo con sinceridad y normalidad". Además, envía un mensaje a la oposición de Colmenar: "Ciertos grupos políticos están metiendo miedo y utilizando sentimientos muy malos para que la gente huya y le dé miedo", subrayaba Blázquez.
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