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"Falta de transparencia, "desprotección", "oscurantismo" y "abandono"; esos son los cuatro pilares sobre los que se asienta el vertedero de Pinto a juicio del Partido Socialista de Madrid. Durante la última Comisión de Medio Ambiente, Agricultura e Interior el diputado socialista, Javier Guardiola, ponía sobre la mesa "la realidad que están sufriendo los vecinos de Pinto". Tras las últimas novedades relativas a la ampliación hasta las 80 hectáreas todas las alarmas han sonado en la localidad.

Durante su intervención, el socialista preguntaba a la directora general de Transición Energética y Economía Circular, Cristina Aparicio Maeztu, por la autorización de una nueva planta de residuos en el municipio de Pinto y la previa también ampliación de las instalaciones. Guardiola señalaba al gobierno del Partido Popular por "sentenciar a los vecinos". En este sentido, responsabiliza al gobierno regional por "hacer que Pinto asuma los residuos de más de dos millones de habitantes". Por ese mismo sentido, el diputado preguntaba por la existencia de algún plan de compensación para los pinteños.

No le temblaba el pulso al socialista al asegurar que estamos hablando de un macrovertedero: "Seamos claros", pedía Guardiola. "Los vecinos lo sufren y la solución que pone la Comunidad de Madrid para solventar su problema es más vertidos", sentenciaba el diputado. A la problemática social y sanitaria, Guardiola señala también "la destrucción medioambiental" del Parque Regional del Sureste; una estrategia que dice "va en contra de la legislación europea, la Red Natura 2000 y de la zona CEPA".

La Comunidad de Madrid responde al PSOE: "No creamos nosotros el vertedero"

Tras la exposición de los datos del socialista, la directora general de Transición Energética y Economía Circular, Cristina Aparicio Maeztu, ponía los puntos sobre las íes. Durante su intervención, Aparicio recordaba que el vertedero de Pinto fue inaugurado en 1986 "bajo un gobierno socialista en la Comunidad de Madrid con Joaquín Leguina y con un alcalde de Izquierda Unida". Teniendo en cuenta el dato, la directora general apuntaba a la estrategia de la Comunidad de Madrid como "una solución moderna y sostenible que busca corregir el modelo antiguo". A colación de ello, insiste: "No estamos creando un vertedero, estamos corrigiéndolo".

Aparicio acusa al PSOE madrileño de "estar mezclando conceptos". Cuando se habla del vertedero, aclara, "sería únicamente el vaso cuatro". En este sentido, expone que dicho vaso "es sobre el que se está autorizando y se va a utilizar una planta de tratamiento avalada por las mejores técnicas disponibles". Sobre esto, pone como ejemplo "las 300 plantas que hay como esta en Europa".

La directora general del área señala a la Mancomunidad del Sur, órgano responsable del vertedero. Si vamos a las actas de la Mancomunidad, Aparicio expone que cuando se presentó este proyecto, la alcaldesa socialista de Getafe era la presidenta y dio pie "al proyecto continuista"; una actuación que —según la propia directora— "agradeció por la celeridad el anterior gobierno de Pinto socialista".

Concluía Aparecio Maeztu asegurando que desde la consejería de Medio Ambiente "se ha velado por la seguridad y transparencia, con la autorización ambiental integrada a toda la parte de información pública y muy importante es una planta que va a estar adaptada a los retos actuales, pero también a los retos futuros". En este sentido, aclara que "no se van a tratar todas las fracciones de residuos; si no que se van a recuperar todos los materiales y se va a poner toda la tecnología disponible para evitar olores y evitar afecciones, sobre todo al suelo".

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