MENÚ

El Ayuntamiento de Móstoles da luz verde a la modificación del Plan Parcial del Sector 7
Se espera, con ello, que los vecinos de esta promoción puedan ocupar sus nuevas viviendas "este mismo otoño"
Móstoles |

Treinta. Ese es el número de familias que se esconde detrás de las modificaciones y consecuentes retrasos de tramitación ocurridos con la promoción de viviendas del Sector 7 de Móstoles, a cargo de la constructora Avintia. Desde mazo de 2017, los vecinos y vecinas que compraron pisos en estas parcelas, situadas en la calle Granada y en la Avenida Abogados de Atocha, a escasos metros de la Universidad Rey Juan Carlos, denuncian haber vivido “varias negligencias por parte de la empresa al edificar”.

Errores que habrían supuesto un retraso de más de dos años en la entrega de las nuevas viviendas, y que habrían provocado que el consistorio no pudiese otorgar los permisos correspondientes para tramitar las licencias de primera ocupación.

Entre los principales motivos del retraso, se encontraría la invasión de 80 cm de suelo público por parte de la empresa constructora, de lo que el consistorio no se habría percatado hasta después de acometerse las obras

Ahora, tras la celebración del último Pleno municipal, el Ayuntamiento da, por fin, luz verde, con el apoyo de la totalidad de la Corporación, a la modificación del Plan Parcial del Sector 7. Decisión que permitirá que los vecinos y vecinas puedan entrar a vivir, previsiblemente, “este mismo otoño”.

Motivos del retraso

Según informa el consistorio mostoleño, el documento que ha sido aprobado en el Pleno recoge algunas modificaciones en el trazado del área. A modo de ejemplo, especifican, “una calle nueva que no venía recogida en el documento anterior o la regularización de los preceptivos centros de transformación, necesarios para un correcto suministro eléctrico”.

Problemas a los que habría que sumar el que, según han indicado desde Ciudadanos (Cs), ha sido el más importante y el que más ‘escoyo’ ha supuesto para la entrega de las viviendas: “la invasión de 80 cm de suelo público por parte de la empresa constructora”. ‘Detalle’ del que el consistorio no se habría percatado hasta después de acometerse las obras.