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Moraleja de Enmedio vivió el pasado 22 de mayo un nuevo pleno municipal que fue calificado como "el más importante del año". La sesión plenaria estuvo marcada por un intenso y prolongado debate político en torno al reconocimiento extrajudicial de créditos que presentó el equipo de Gobierno, la aprobación inicial del Presupuesto Municipal de 2025 y la modificación del plan de ajuste financiero. Las tensiones entre el equipo de gobierno (PP y VOX) y el grupo socialista (PSOE) fueron nuevament la tónica dominante con visiones prácticamente contrapuestas de la realidad económica del municipio y de las soluciones que se deben abordar.

El punto más controvertido fue el Reconocimiento Extrajudicial de Crédito (REC) que presentó el equipo de Gobierno por importe de 16.488,43 euros, destinado a pagar facturas de servicios prestados en 2024 pero registradas en el consistorio por las propias empresas en 2025. El PP y VOX defendieron la legalidad del procedimiento y lo presentaron como una herramienta necesaria para garantizar el pago a proveedores, acusando al anterior gobierno socialista de haber utilizado este mecanismo de forma aún más abusiva y sin crédito presupuestario. Arantxa Godino explicó que en la actual situación sí se cuenta con partidas suficientes y que la cifra reconocida es simbólica frente al presupuesto general del consistorio que asciende a 6 millones de euros. La primera teniente de alcalde, Selene Durán (Vox) también defendió esta figura del REC y explicó que era la única forma de pagar a las empresas que habían prestado sus servicios en el 2024 pero que las facturas las habían presentando con el año vencido ya en el ejercicio de 2025.

El PSOE, sin embargo, denunció el uso reiterado del REC como señal de "descontrol presupuestario, desidia administrativa y falta de planificación". Además, ponían el foco en la existencia den un reparo suspensivo de la Intervención Municipal. Para el grupo socialista que lidera Valle Luna, se han omitido trámites esenciales del procedimiento, lo que a su juicio vulnera la legalidad y daña la imagen del Ayuntamiento.

Aprobación inicial del presupuesto

La misma tensión se vivió con el debate del siguiente punto del orden del día, la aprobación inicial del Presupuesto de 2025. PP y VOX señalan que estamos ante un “hito” después de años sin cuentas aprobadas. En la etapa socialista, el último presupuesto aprobado databa de 2018 que, además, después fue declarado nulo de pleno derecho por la justicia. El gobierno local subrayó su compromiso con el equilibrio presupuestario, la reducción del gasto en personal, el cumplimiento del plan de ajuste y la implementación de medidas para reducir la deuda municipal, que alcanza los 43 millones de euros.

Entre las inversiones previstas en las cuentas presentadas destacan el embellecimiento de la entrada al municipio (cuesta de la iglesia), la ampliación del cementerio y la renovación de infraestructuras menores. Además, se contemplan partidas para actualizar el inventario municipal y para cubrir costes de servicios básicos como la recogida de residuos.

Por su parte, el PSOE cargó duramente contra el presupuesto, calificándolo de “panfleto” que prioriza “arreglos estéticos” frente a necesidades urgentes como el estado de las calles, parques, contenedores y servicios sociales. Especialmente crítica fue su postura ante el cierre de la escuela infantil y el despido de siete educadores, al que se refirieron como la “medida estrella” del gobierno.

El grupo socialista acusó también al gobierno de falta de transparencia, afirmando que no han recibido la documentación solicitada y que los vecinos no tienen acceso completo a la información presupuestaria. La alcaldesa negó estas afirmaciones y aseguró que toda la documentación está disponible para la ciudadanía, además de criticar al PSOE por no asistir a las comisiones informativas.

Modificación del plan de ajuste

Otro de los puntos destacados de la sesión fue la modificación del plan de ajuste, donde el PP responsabilizó al anterior gobierno socialista de haber dejado comprometido al Ayuntamiento con medidas impopulares como la subida del IBI y el cierre de servicios no obligatorios. VOX respaldó estas críticas, reafirmando su compromiso con la “depuración de cuentas” y el saneamiento financiero.

Tras dos años de mandato, la tónica general de enfrentamiento entre el equipo de Gobierno y el partido de la oposición seguirá siendo la norma por lo que nos espera otros dos años de política municipal con continuos enfrentamientos, producidos ante la enorme diferencia de modelo de pueblo que tienen por un lado el PSOE y por el otro el PP y Vox.