Primera jornada de la segunda parte de la liga, y esta vez tocaba recibir en casa a nuestros vecinos de Guadalajara.
El partido comenzó con un intercambio de canastas y con cada equipo haciendo lo que mejor sabe, los alcarreños dominando la pintura, y los nuestros con vertiginosos contraataques y canastas de tres puntos.
Cuando habían pasado los primeros 10 minutos de partido los nuestros ya iban cogiendo las primeras ventajas, aunque cortas (18-15). A partir de aquí y hasta el último cuarto, un cuarto para cada equipo. El segundo dominado por los nuestros, cimentado en una gran defensa y aunque con poco acierto en ataque, conseguimos dejar a los morados en tan solo 9 puntos, para llegar al descanso con un 36-24 para los nuestros, que dejaba al rival tocado con faltas en hombres importantes y con una considerable desventaja en el marcador en un campo siempre difícil para todos los equipos que han pisado Espartales.
Pero a la salida de vestuarios, los visitantes mostraron su mejor versión en ataque y en defensa, y con su dominador juego bajo aros consiguieron llegar a ponerse por delante y llevar el miedo a la abarrotada grada alcalaína. Llegamos así al último cuarto, donde los nuestros consiguieron imponer su ritmo, llevar el balón rápido de una mano a otra hasta encontrar la mejor opción, y con otro despliegue físico en defensa, acabar poco a poco con las opciones de los alcarreños a base de triples y canastas bajo el aro. Al final del partido, con los dos equipos pensando en el resultado de la ida, los nuestros queriendo ganar por más de 9 y los rivales tratando de evitarlo.
Al final, 79-65 y victoria clara para los nuestros que siguen guiados por una grada mágica que hace casi imposible para los rivales la victoria en Espartales.