Alcalá Magna ya está preparada para su próxima apertura prevista para el inicio de la fase 2 en la Comunidad de Madrid, según se contempla en el Plan para la transición hacia una nueva normalidad del Gobierno de España.
Para garantizar la seguridad de sus usuarios y empleados, el Centro Comercial ha puesto en marcha un protocolo de actuación en el que se incluyen todas las medidas de prevención y seguridad necesarias y recomendadas por las autoridades sanitarias.
Para su puesta en funcionamiento, Alcalá Magna ha incrementado el personal de seguridad y limpieza con el fin de disponer de un control exhaustivo de aforo y accesos, así como para garantizar la correcta desinfección de todas las zonas de transito susceptibles de ser tocadas. Los usuarios dispondrán de la ayuda de todo el personal de los establecimientos del espacio que durante las últimas semanas han recibido formación para el correcto funcionamiento del protocolo.
Las instalaciones cuentan con cartelería informativa para concienciar del respeto hacia estas medidas, y señalética con las indicaciones pertinentes para evitar cruces, respetar la distancia de seguridad y conseguir un flujo óptimo de personas en colas, zonas comunes y aparcamiento. Para todos los usuarios, Alcalá Magna ha incorporado dispensadores de gel hidroalcohólico en los ascensores, pasillos de los aseos y junto a los cajeros, además de en los accesos donde también se han instalado alfombras desinfectantes para acceder al centro.
En su compromiso por seguir garantizando el mejor servicio bajo estas circunstancias excepcionales, el Centro Comercial ha habilitado nuevas zonas en el parking para un seguro y rápido acceso. Así, aquellos clientes que quieran devolver o recoger un producto podrán hacerlo en la zona de parking express, con la posibilidad de estacionar su vehículo hasta un máximo de veinte minutos. Y aquellos que necesiten recoger un pedido podrán hacerlo en la zona delivery, donde podrán disponer de la compra adquirida en la empresa que ofrezca este servicio.
Por último, temporalmente Alcalá Magna se ve obligada a cancelar el servicio de ludoteca y talleres infantiles, así como a deshabilitar las zonas de descanso, infantiles y fuentes de agua para evitar el acercamiento de personas y un posible contagio del COVID-19.
Este protocolo de medidas ha sido gestionado por el equipo del Centro Comercial de Alcalá Magna, que durante el confinamiento ha trabajado de manera intensa para seguir manteniendo la confianza de sus usuarios y poder ofrecerles la mejor experiencia para su disfrute.