En la segunda semana de confinamiento de Alcalá el Ayuntamiento ha decidido volver a cerrar los mercadillos debido a la situación crítica en la que se encuentra la ciudad. En respuesta, el Partido Popular municipal critica al alcalde su falta de voluntad para mantener abiertos estos comercios, y le reprocha que otros municipios vecinos, que también tienen limitaciones perimetrales, sí los mantienen. Además, la formación azul insiste al Consistorio en que se deje de guerras políticas y se centre en gobernar su ciudad.
Para los populares “el mensaje de que se trata de una cuestión sanitaria no se sostiene cuando solo se han suspendido los mercadillos y no otras actividades municipales. ¿Cuál es el motivo para adoptar medidas solo en los mercadillos al aire libre, que, por cierto, venden productos de primera necesidad?”. También añaden su sorpresa ante las declaraciones que realizó la semana pasada la concejala de Comercio, Rosa Alicia Gorges, acusándoles de querer poner en peligro a los alcalaínos. Y es que esta misma concejala, en la comisión correspondiente del 16 de diciembre, sacaba pecho su gestión cuando aseguraba que los mercadillos eran espacios seguros.
“Se está cumpliendo el protocolo de seguridad y espacios, los puestos de alimentación ponen todos los días y el resto de categorías montan días pares e impares alternativamente dependiendo de la semana. Todo ello está consiguiendo que se trate de un espacio seguro para ir a comprar y para poder mantener la actividad de los mercadillos”, recogía el citado acta. “¿Estaba poniendo en peligro entonces a los alcalaínos o siguen siendo espacios seguros?”, se pregunta el PP de Alcalá.
La formación azul asegura que son conscientes de la grave situación que está atravesando nuestra ciudad, y que los comerciantes también lo son. Pero estos mercadillos suponen una forma de vida para muchos vecinos de la ciudad, además de que son espacios al aire libre en los que se han establecido todas las medidas de seguridad para evitar los contagios.