El obispo de la Diócesis de Getafe, Ginés García Beltrán, junto a la dirección de Cáritas Diocesana de Getafe y el alcalde de Leganés, Miguel Ángel Recuenco, inauguraron el Centro de Día San Juan XXIII de Cáritas Diocesana de Getafe, situado en el barrio de Zarzaquemada, en Leganés. Este proyecto refuerza el compromiso con el cuidado y la dignidad de las personas mayores, enmarcado dentro del Jubileo 2025 de la Esperanza.
Cáritas, con este centro, responde a la creciente necesidad de recursos para mayores en la zona, donde el índice de envejecimiento supera la media del municipio. Es el único centro de día ubicado en el núcleo urbano de Leganés y se plantea como un referente de atención integral para este colectivo.
Un acto marcado por la esperanza y la colaboración
El evento inaugural se inscribe en el Jubileo 2025 de la Esperanza, una iniciativa de la Diócesis de Getafe junto a Cáritas para renovar la ilusión y fortalecer la esperanza, especialmente entre los más vulnerables. Durante su intervención, el obispo Ginés García Beltrán destacó que "un centro de mayores no es un aparcamiento de coches, es un lugar donde vienen hombres y mujeres que lo han dado todo por nosotros. Son las raíces, los sueños, y son Cristo mismo".
El edificio, cedido por la Diócesis de Getafe a Cáritas en 2022 para acoger a refugiados ucranianos, fue adaptado por Cáritas Diocesana de Getafe gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Leganés, que aprobó por unanimidad una ayuda económica para su reforma.
En palabras del alcalde Miguel Ángel Recuenco: "El origen de la reforma de este centro es la consecuencia del trabajo común entre el ayuntamiento, Caritas y la Diócesis, lo que demuestra de la necesidad de no titubear y tender la mano". Además, el regidor quiso reconocer el sacrificio y trabajo de la generación que ahora está en el centro “El barrio en el que estamos creció gracias a gente como vosotros que un día llegasteis a Leganés a escribir las páginas de la vida de la ciudad. Os merecéis el reposo en un centro de estas características.”
Ginés García, quiso hacer un llamamiento a la unidad como remedio ante la polarización “debemos de ver lo que nos une y lo que podemos hacer juntos”.
Un espacio al servicio de los mayores
El Centro de Día San Juan XXIII comenzó a operar el 1 de octubre de 2024, coincidiendo con el Día Internacional de las Personas Mayores. Desde entonces, se ha convertido en un entorno acogedor y familiar que ofrece apoyo, compañía y actividades para enriquecer esta etapa de la vida.
En palabras de Jesús Casares, director de Cáritas Diocesana de Getafe “inauguramos mucho más que un edificio, un hogar donde el centro es el amor con mayúsculas, donde nuestras mayores encontrarán atención, cuidados compañía, amistad y la certeza de que son valiosos y queridos”.
Sebi, una de las usuarias del centro, compartió su experiencia durante la inauguración: "Al principio no quería venir porque temía sentirme sola o no encajar, pero gracias a las personas de este centro, mi vida ha cambiado y soy más feliz".
El centro atiende actualmente a 27 mayores con diversas necesidades y patologías, a los que ofrece servicios personalizados para fomentar un envejecimiento activo y saludable:
- Cuidado personal: manutención diaria (desayuno, comida y merienda), higiene, enfermería y control de medicación.
- Animación y terapia geriátrica: actividades de terapia ocupacional y fisioterapia.
- Atención espiritual: asistencia religiosa para un cuidado integral.
Un lugar con historia y futuro
Ubicado en un edificio que en los años 70 funcionó como escuela infantil, el Centro de Día San Juan XXIII cierra un círculo generacional, brindando atención ahora a los padres de aquellos niños que un día jugaron en sus aulas. El barrio de Zarzaquemada registra un alto índice de envejecimiento: el 34,2 % de su población supera los 65 años, un 11,95 % más que la media del municipio.
Con este proyecto, Cáritas y la Diócesis de Getafe refuerzan su compromiso de combatir la soledad de los mayores y promover su bienestar físico y emocional, ofreciendo un espacio donde se sientan cuidados, valorados y llenos de esperanza.