Estamos acostumbrados a veces sin darnos cuenta a etiquetar a personas, algunos lo hacen constantemente y sin ningún pudor, y a hacer valoraciones sobre cualquier situación sin ningún miramiento, sin conocer por supuesto nada de la vida de la otra persona. Curiosamente todo eso que hacemos con los demás, nos olvidamos de hacerlo con nosotros mismos, pero con el enfoque positivo, para bien...que es de lo que se trata.
Cada unx de nosotros aporta un valor, en base a su conocimiento y su experiencia. No creamos que es un error reconocer lo que hacemos bien, ni asumir que aportamos un valor a la empresa y a la sociedad. Todos somos buenos en algo, todo el mundo tiene virtudes y puntos fuertes con lo que conviene primero conocerlos y luego ponerlos a tu disposición, para disfrutar de la vida, avanzar y conseguir los objetivos que te propongas. No lo olvides, en los tiempos difíciles tendemos a dudar si nos ponen contra las cuerdas, incluso a adoptar un rol que no te pertenece. Un valor 7 no puede hacer lo que haría alguien con un valor 3, si estás en una franja que no te pertenece no es tu sitio, quizás del otro lado se puedan equivocar en como te están etiquetando pero la solución está en TI.
¿Qué valor tienes? ¿Qué aportas? ¿Estas dónde y cómo te gustaría estar?...