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Noelia Posse, la alcaldesa de Móstoles se ha ofrecido a que el ayuntamiento asuma los gastos que suponen la tasa de la EVAU a los alumnos tras la iniciativa de un instituto que había comenzado una colecta entre los profesores, ante la imposibilidad de algunos de ellos de poder pagarla.
Desde la dirección de este centro educativo, del que no ha transcendido el nombre, se envió un email a todos los profesores pidiendo su colaboración para poder ayudar a algunos de los alumnos que no podían permitirse pagar las tasas para poder acceder a la prueba de acceso a la universidad, antes conocida como Selectividad, que en la Comunidad de Madrid ronda los 100 euros como mínimo.
Desde la delegación de Educación del sindicato Comisiones Obreras, nos cuentan que esta situación vivida en este instituto de la localidad de Móstoles no es un caso aislado, ya sucedió en años anteriores en otras zonas de la Comunidad de Madrid y al haber tenido tanta transcendencia en los medios, auguran que habrá muchos más casos de centros educativos que den este paso para ayudar a sus alumnos.
Aunque agradecen la generosidad de la alcaldesa de Móstoles, consideran que quien debía de haber respondido es la Comunidad de Madrid, facilitando más ayudas para aquellos alumnos con más dificultades económicas que se quieran seguir formando después del instituto. En esta ocasión, ni la Comunidad de Madrid, ni la Universidad Rey Juan Carlos, lugar donde se va a realizar las pruebas de EVAU, ofrecieron ninguna solución.
Ya ha ocurrido en otros centros de la Comunidad de Madrid y seguramente haya más casos que salgan a la luz
No solo las tasas de la EVAU son las más altas de toda España, sino que los precios públicos de los grados universitarios son los más caros de todo el país solo adelantados por Cataluña. Estas dificultades económicas a las que se tienen que enfrentar las familias de clase media-baja provoca en los alumnos un desinterés por su educación ya que creen que "no les sirve de nada estudiar", sobre todo porque después del instituto no van a poder desarrollare en una carrera o grado que les forme para el futuro ante la falta de apoyo económico de sus familias.
Desde las asociaciones piden una mayor ayuda para estos alumnos en riesgo de exclusión para que la educación no se convierta en un lujo.