Una trabajadora de Móstoles Desarrollo ha interpuesto una denuncia en la Comisaría de Policía Nacional de Móstoles contra el portavoz de Más Madrid, Gabriel Ortega, por un presunto delito de coacciones que ocurrió el 31 de mayo.
La trabajadora ha denunciado que el 31 de mayo tres miembros del Consejo de Administración se presentaron en su despacho de la empresa municipal y "le requerían ver la nómina de una trabajadora, a lo que la denunciante se negó en. Virtud de la Ley de Protección de Datos".
Por la negativa de la mujer "un consejero tomó una actitud agresiva ante la denunciante diciéndole de malas formas: `somos tus jefes y nos vas a dar lo que te pedimos´, por lo que la denunciante se vio coaccionada".
La trabajadora identificó a Gabriel Ortega como "la persona que profería esos gritos". Según el atestado policial "Gabriel Ortega llamó a la Policía Municipal de Móstoles para que se personasen a presionar la denunciante, significando que una vez hizo acto de presencia en el lugar un indicativo de la Policía Local, tomaron nota de los allí presentes y aconsejaron a la denunciante formular denuncia en la Comisaría de Policía Nacional de Móstoles".
Le requerían ver la nómina de una trabajadora, a lo que la denunciante se negó
Este periódico se ha puesto en contacto con el portavoz de Más Madrid, Grabiel Ortega, quien ha asegurado que toda la información que ha dado la trabajadora "es falso". Esto es una "campaña de intoxicación contra mi, que no soportan que haya denunciado los despidos improcedentes que se han producido en Móstoles Desarrollo, las colocaciones de forma poco ética que se han producido y el uso de una empresa pública como la filial del PSOE donde coloca a quien debe favores".
Ortega ha explicado que había solicitado "una información, a la que tengo derecho pero se me negó por parte de la consejera delegada, por el directo técnico y por la susodicha de la información". El portavoz asegura que fue la Consejera Delegada la que le dijo que si quería la información subiera a la segunda planta porque sé la daría por escrito.
"Hay un acta de la policía municipal que acredita lo que digo", explica Gabriel Ortega.