El Corte Inglés opta por suspender los pagos del alquiler de algunos de sus centros para cuadrar números y hacer frente a la crisis que está provocando el coronavirus. Tras más de 55 días con sus establecimientos cerrados, la empresa de los grandes almacenes deja de pagar el alquiler de los espacios que no son de su propiedad, como ha podido saber Vozpópuli.
El diario recoge además, que el suspenso de las obligaciones económicas del contrato de arrendamiento afecta a la empresa Unibail-Rodamco-Westfield (URW), propietaria desde diciembre de 2018 es el 'casero' de los grandes almacenes en Parquesur (Leganés) y La Vaguada (Madrid), y otras sociedades como Inbest Prime, propietaria del edificio donde se aloja uno de los centros de El Corte Inglés en Valencia.
En estos casos, el Gobierno fomenta la negociación entre inquilinos y propietarios comerciales, pero no obliga a estos últimos a tomar ninguna decisión, ni se prevé para ellos ningún tipo de asistencia económica. Tan solo se obligada la aplicación de moratorias en los casos en los que arrendatario sea una pyme o autónomo, y no se aplica a grandes empresas como ECI.
Cabe recordar, que antes de la llegada de la enfermedad COVID-19, El Corte Inglés se estaba enfrentando a la mayor reestructuración de su historia que afectaría a 25 centros que sufrirían cierres o transformaciones.