Sabíamos que la apertura de la piscina municipal de Humanes de Madrid, tras dos años cerrada, iba a dar que hablar, pero no nos imaginábamos que iba a ser por estos motivos. Decenas de jóvenes se han servido de la ñapa ‘chapucera’ que tapa uno de los agujeros que presentaba la valla en la zona trasera de la piscina para acceder a las instalaciones. Más allá del quebranto económico que ha supuesto su entrada, el aforo se ha visto generosamente sobrepasado.
Además, la actitud de estos bañistas procedentes de Humanes, Getafe y Leganés ha dejado mucho que desear. Han cometido destrozos en el mobiliario de la piscina y han increpado al personal.
Una placa metálica tapa el agujero que presentaba la valla y que aún no se ha reparado
Así ha sido el estreno de la piscina de Humanes esta temporada: descontrolado y a medio gas con solo uno de los vasos de la piscina abierto
Testigos que han presenciado la escena han tachado de “caos” el control que se ha hecho del aforo en las instalaciones. La empresa adjudicataria, ESPACIOS SERVICIOS A COMUNIDADES S.L, se ha decantado por un sistema basado en pulseras para bañistas, pero la picaresca española ha vuelto a hacer de las suyas. A través de las redes sociales, los usuarios han propiciado que estos brazaletes pasen de mano en mano.
Un cúmulo de circunstancias son las que han desatado un caos y tras las alerta de la propia dirección de la piscina a la Policía Local de Humanes, los agentes han puesto punto y final al descontrol desplazándose hasta las instalaciones para proceder al desalojo. En esta ocasión, han contado con el apoyo de Guardia Civil.
Así ha sido el estreno de la piscina de Humanes esta temporada: descontrolado y a medio gas.