Alemania ha vivido la noche de este lunes uno de los episodios que vaticinaba (y temía) desde hacía semanas con la llegada de la Navidad a la capital berlinesa. Calificado por fuentes policiales como "probable atentado terrorista" en un principio, y confirmado por la canciller Angela Merkel esta misma mañana, un camión ha irrumpido en un mercado navideño de Breitscheidplatz, en el centro de Berlín, arrollando indiscriminadamente a los visitantes.
El suceso se ha saldado con la vida de 12 personas, 48 heridos (uno de ellos, de nacionalidad española, según ha confirmado el ministro de Asuntos Exteriores Alfonso Dastis, que precisó que "no se teme por su vida") y la detención, poco tiempo después del atropello, del "presunto autor del ataque": un joven maquistaní que entró en Alemania hace un año en calidad de refugiado. El segundo ocupante del vehículo, de origen polaco, murió por heridas de bala.
La zona atacada es una de las más turísticas de Berlín, repleta de comercios, restaurantes y hoteles, además del famoso zoo de la ciudad y de la Iglesia Memorial Kaiser Wilhelm. Hoy, la plaza, junto a la que se erige la emblemática Gedächtniskirche, se mantiene acordonada.
El ataque terrorista se salda con 12 fallecidos y 48 heridos, uno de ellos de nacionalidad española
Se confirma el ataque terrorista
La canciller alemana Angela Merkel ha confirmado este martes que el dramático atropello es un "acto terrorista". "Será particularmente difícil para nosotros soportar, si se confirma, que este acto ha sido cometido por una persona que estaba pidiendo asilo en Alemania", ha declarado la canciller. "Es un ataque a toda la sociedad alemana. Quiero que sepan que todos, un país entero, esta unido por el dolor", afirmó.
Alemania vive hoy una jornada de luto oficial por las víctimas, mientras los ministros de Interior de los estados federados revisan las medidas de seguridad entorno a los tradicionales mercadillos de Navidad, muchos de los cuales permanecerán cerrados hoy.