Nuestra ciudad ostenta el dudoso honor de ser la segunda ciudad más contaminante de la región, solo por detrás de la capital. A esa conclusión ha llegado el último informe elaborado por la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid en el que se pone de manifiesto que Coslada ha seguido superando los límites máximos de emisiones de dióxido de nitrógeno (NO2) permitidos por la legislación española y de la Unión Europea.
Tráfico rodado y localización
En 2016 y 2017, Coslada alcanzó una media anual de NO2 de 47 mg/m3, siete décimas más del máximo permitido, fijado en un 40 mg/m3. Durante los tres primeros meses de este año, la cifra media descendió sensiblemente hasta 44 mg/m3, pero aun así sigue suponiendo un incumplimiento de la normativa en vigor.
Entre las causas por las que se justifican la elevada contaminación se encuentra la cercanía al aeropuerto, a tan solo 10 kilómetros de distancia, además de la gran actividad industrial que registra Coslada. Nuestra ciudad alberga el mayor centro logístico del sur de Europa, con una superficie de un millón de metros cuadrados y más de 100 empresas que utilizan como centro de distribución estas instalaciones.
Nuevas medidas
Tras conocerse las cifras, el ayuntamiento de Coslada ha anunciado que tomará medidas en el asunto. El consistorio está elaborando el borrador de un protocolo de actuación para los escenarios de alta contaminación, con el que pretende "cumplir las normas", además de "adoptar un modelos de cambio de cultura en la movilidad urbana y en la forma de planificar y hacer ciudad".