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Detenido un fotógrafo de moda infantil por abusar de "decenas de niñas"
El detenido ofrecía sesiones de fotografía gratuitas para poder acercarse a sus víctimas
Colmenar Viejo |

Detenido en Madrid un fotógrafo de 51 años que se inventaba supuestas campañas de moda infantil para poder abusar de decenas de niñas menores de distintos puntos de la Comunidad. Aunque su estudio de fotografía se encontraba en el distrito de Usera en Madrid, la policía ha identificado múltiples denuncias en municipios como Parla, Getafe, Leganés, Colmenar Viejo, San Lorenzo de El Escorial, Velilla de San Antonio y El Bolao.

El hombre llevaba diez años ejerciendo la profesión de fotógrafo infantil, y cometiendo los supuestos abusos, pero no fue hasta marzo de este año cuando fue detenido después de que la madre de dos niñas que acudieron a hacerse fotos, lo denunciara en una comisaría de Colmenar Viejo. Según su testimonio, las niñas se encontraban en un vestidor habilitado en el estudio cuando el fotógrafo entró para verlas desnudas y realizarles tocamientos.

Actualmente es la Unidad de Atención a la Familia y a la Mujer (UFAM) de la Policía Nacional, quienes se han hecho cargo de la investigación, reuniendo, por el momento, once denuncias por hechos muy similares, todos ellos ocurridos a niñas de entre 9 y 11 años. Otras 15 familias han acudido a las dependencias policiales para informarse sobre el caso . El detenido lleva desde abril en prisión provisional.

La Policía ha reunido, por el momento, once denuncias de niñas de entre 9 y 11 años 

Tal como han explicado fuentes de la investigación, el modus operandi del detenido era siempre el mismo. Pedía a las menores que entraran en el estudio solas, sin la compañía de sus padres, y las hacía cambiarse en un pequeño vestidor al que entraba haciéndose el despistado. Además les hacía preguntas comprometidas como si habían tenido sexo, si se masturbaban o si les había bajado la regla.

No entregaba todo el material de las sesiones a los padres, guardaba parte de las fotografías para sí mismo, y se inventaba campañas ficticias para hacer que las niñas aparecieran en bañador o con poca ropa. Una de las menores que denunció aseguraba que le había tocado el culo y otra que le realizó caricias en la zona vaginal por encima de la ropa.

A otras las invitaba junto a sus madres al Parque de la Bombilla o al de Atracciones, donde también aprovechaba para realizar tocamientos o intentaba convencer a la progenitora para hacerles fotos juntas desnudas.